
Diversión segura: el fin de semana se realizaron 16 eventos autorizados y se desalojaron dos fiestas clandestinas
- En una de ellas se secuestraron bienes por un valor aproximado de 33 millones de pesos.
A través de nuevos formatos, la Municipalidad de Córdoba promueve las actividades autorizadas y acompaña a las iniciativas privadas de entretenimiento legal, en desmedro de las fiestas clandestinas. El pasado fin de semana, en la ciudad se desarrollaron 16 eventos autorizados, mientras que se desarticularon dos fiestas clandestinas.
Algunos de los eventos autorizados por el Ente de Fiscalización y Control se realizaron en 990 Arte Club, Sargento Cabral, Atenas, Sala del Rey, Margarita, Bela Lugosi, Club Paraguay, Casa Babylon, Kuarteto Club, Zen Disco y La Barra Boliche.
Entre ellos destacó el recital de La Mona Giménez en el estadio Sargento Cabral, que el viernes tuvo una capacidad de 4.803 personas, con un riguroso control del aforo. También se controló la implementación de las medidas de seguridad, incluyendo la presencia de puestos de hidratación y un servicio de ambulancia contratado, sin registrarse derivaciones a hospitales o centros médicos.
En todos los casos, durante los operativos se realizaron inspecciones previas junto a la fiscalización en tiempo real para garantizar el cumplimiento normativo y el bienestar de los asistentes.
Se sumaron los cuatro eventos acompañados y facilitados por el programa #CórdobaImpulsa: el viernes, el show internacional Mayumana en Quality Espacio y la propuesta musical de Chili Street Club, mientras que el sábado, tuvo lugar la Liga de Hip Hop en Plaza España y las noches de Ida Bar.
Este programa promueve la formalización, el control y el uso responsable del espacio público y genera que muchos espacios habilitados comiencen sus eventos en horarios más tempranos. De esta manera pueden realizar eventos especiales, como ferias, música en vivo y actividades recreativas, previa inspección y autorización.
Como espectáculo deportivo masivo, además se desplegó un operativo integral de supervisión y acompañamiento en el Estadio Julio César Villagra, durante el partido del sábado pasado entre Belgrano y Banfield. De esta manera se garantizó un espacio ordenado y seguro para los asistentes.
Esta articulación entre el Ente Municipal de Fiscalización y Control, productores, empresarios y artistas tiene un objetivo común: una noche cordobesa segura, diversa, controlada, que potencie la cultura, el turismo y el desarrollo económico de la ciudad.
Clandestinas y clausura
A la promoción de la actividad legal se incorporan los controles sobre las fiestas clandestinas, que ponen en riesgo a las personas y alteran la convivencia comunitaria. Los operativos se ejecutan junto a la Policía de la Provincia de Córdoba.
En ese sentido, el control social juega un papel importante para detectar los espacios en infracción. Los vecinos pueden denunciar situaciones irregulares al 103 y el 911.
La primera clandestina se desactivó el sábado 9 de agosto en las Toscas 2985, del barrio homónimo y fue impulsada tras una denuncia ciudadana al Ministerio de Seguridad provincial.
En el domicilio había más de 450 personas, incluyendo menores de edad, en un ambiente que no contaba con las mínimas medidas de seguridad. El lugar registraba denuncias previas por infracciones similares, lo que permitirá ampliar las imputaciones contra los responsables.
El operativo contó con la coordinación del ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, y la participación de inspectores de la Secretaría de Gobierno, bajo la dirección de Rodrigo Fernández, junto a personal de Infantería y del Ministerio de Seguridad.
La segunda fiesta ilegal se desactivó en la madrugada del domingo 10 de agosto, que se desarrollaba en un predio ubicado sobre avenida Japón al 1400, en el sector conocido como “Predio Deportivo La Lora”.
Se constató la presencia de 600 personas, música a alto volumen y expendio de bebidas alcohólicas, en un entorno que generaba molestias a los vecinos y riesgos para la integridad de los asistentes.
El evento violaba lo establecido en el Artículo N.º 92 Bis de la Ley Provincial N.º 12468. Este encuadramiento se corroboró en el lugar, que no tenía habilitación, ni autorización municipal, además del cobro de entrada y estacionamiento. Lo más grave: carecía de todas las medidas de seguridad reglamentarias.
Durante la intervención, se secuestraron bienes por un valor aproximado de 33 millones de pesos, entre equipos de audio, sonido y bebidas alcohólicas, que quedaron bajo resguardo hasta la notificación del juzgado interviniente.
La acción, encabezada por inspectores y funcionarios del Ente Municipal de Fiscalización y Control, bajo la dirección ejecutiva del Dr. Ezequiel Hormaeche Actis, junto a efectivos de la Policía de la Provincia.
En simultáneo, el municipio también realizó la clausura del bar Botton, ubicado en Dr. Tristán Achával Rodríguez N° 225, barrio Güemes. Allí se verificó un exceso en la capacidad permitida: había 251 personas y el límite era de 180. A esa infracción se sumaron la ausencia de medidas de seguridad.