Comenzó la etapa final de la obra de recuperación del Centro Cultural General Paz
- Las tareas empezaron con la pintura en el cielorraso del edificio.
- En el subsuelo se refuerza la estructura a los fines de garantizar la integridad y durabilidad a largo plazo del espacio.
La Municipalidad de Córdoba, a través de la Secretaría de Desarrollo Urbano, avanza en la etapa final de recuperación y puesta en valor del Centro Cultural General Paz.
Esta semana, comenzaron los trabajos de pintura interior en el cielorraso del edificio y se extenderán a otras áreas en las próximas etapas.
Las puertas del edificio de la calle Pringles y Catamarca fueron reemplazadas por nuevas debido al avanzado estado de deterioro, manteniendo su estética original.
En el subsuelo del edificio, se lleva a cabo un refuerzo estructural que servirá para garantizar su integridad y durabilidad a largo plazo.
Además, las veredas exteriores han sido completamente finalizadas, mientras que en las interiores se está llevando a cabo la colocación de los nuevos mosaicos
Simultáneamente, se están completando las reparaciones de los revoques interiores del edificio Roca, una estructura en “ele” que abraza a la antigua edificación en 1982.
El Centro Cultural General Paz posee dos estructuras: un pabellón de hierro instalado en 1917 y un agregado de 1982.
Funcionó como un mercado municipal, pero debido al deterioro, dejó de operar. El mayor desafío fue la falta de techo, ya que hace aproximadamente 20 años se retiraron las chapas y se colocó una membrana que no proporcionó una cobertura adecuada, lo que provocó notables daños con cada lluvia.
En el marco de las obras de recuperación, este año, la Municipalidad de Córdoba retiró las chapas existentes en el techo y las reemplazó en su totalidad, contribuyendo con la renovación y revitalización de esta importante estructura cultural.
A su vez, realizó trabajos de levantamiento de membranas en el SUM (Salón de Usos Múltiples) para prevenir filtraciones de agua por lluvia.
Esta emblemática estructura, ubicada en la esquina de Pringles y Catamarca, se encontraba en un avanzado estado de deterioro y abandono.
Fue así, que a partir de la gestión del intendente Martín Llaryora, comenzó a darle nuevamente valor a través de una serie de obras, con el objetivo de recuperar otro de los espacios tradicionales de la ciudad.